Más de 100.000 visitas se contabilizaron en la celebración del Día del Patrimonio de Niñas, Niños y Adolescentes, actividad organizada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y que se desarrolló el sábado 16 de noviembre, simultáneamente, en más de 130 comunas. La cartelera superó las 700 actividades gratuitas, que incluyeron espectáculos de organilleros-chinchineros, talleres de circo, cuentacuentos ancestrales, juegos tradicionales, recorridos inclusivos y cientos de actividades que contaron con una masiva asistencia. Este despliegue se llevó a cabo tanto de manera presencial como virtual, gracias al esfuerzo conjunto de casi 400 organizaciones públicas, privadas y de la sociedad civil.
“Esta jornada reflejó el compromiso del Gobierno con el patrimonio cultural, que puso en el centro a niñas, niños y adolescentes como protagonistas de la transmisión de saberes y tradiciones. Ver a tantas familias salir a jugar y explorar sus raíces nos llena de esperanza y orgullo, demostrando que invertir hoy en cultura es también invertir en un mejor futuro”, señaló la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo.
Las celebraciones comenzaron en el Museo Chileno de Arte Precolombino, con una actividad que reunió a la ministra de las Culturas Carolina Arredondo, con niños y niñas cultores. En esa instancia, que contó también con la participación de la ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro; con la subsecretaria del Patrimonio, Carolina Pérez; y con la directora del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Nélida Pozo; las niñas y niños compartieron sus experiencias como cultores de oficios tradicionales.
Este año, bajo el lema “Salgamos a jugar”, el evento rindió homenaje al Día Universal de la Niña y del Niño y a la Declaración Universal de los Derechos de la Niñez, poniendo énfasis en la transmisión intergeneracional de saberes a través del juego. La programación, co-creada con la ciudadanía, permitió que niñas, niños y adolescentes fueran los protagonistas, destacando iniciativas como archivos y museos escolares que rescatan sus historias locales.
En esta nueva versión, las regiones con mayor cantidad de visitantes fueron la Metropolitana, Biobío, Valparaíso, Los Lagos y Coquimbo, reflejando el éxito de las actividades en áreas urbanas y rurales en todo el país, y demostrando el alcance de una oferta cultural accesible y descentralizada.
Entre los espacios más visitados, destacaron por su alta concurrencia el Palacio de La Moneda, la Biblioteca Municipal de Concepción, el Museo Nacional de Bellas Artes y el Museo Regional de Rancagua, que se consolidaron como los principales puntos de atracción cultural en esta edición.
Por su parte, entre las actividades con mayor convocatoria, sobresalieron la “Recreación del Despacho Presidencial del Palacio de La Moneda”, “Descubre Rancagua con Tito Lastarria”, “Vive el Patrimonio en Quinta Normal”, “Cuenta cuento La Flor del Chagual en la Biblioteca Pública de Catemu” y la “Feria de patrimonios de Arica”.
El Día de los Patrimonios de Niñas, Niños y Adolescentes se realizó los años 2016 y 2017, alcanzando en su conjunto más de 60.000 visitas. El significativo aumento en la participación que experimentó en 2024, pone de manifiesto el interés de la ciudadanía por acceder a la cultura y demuestra el impacto de la descentralización como política de gobierno, fomentando el acceso igualitario a los espacios culturales. La gran convocatoria fortalece el compromiso de la institucionalidad patrimonial por impulsar la participación en regiones, subrayando el rol fundamental de las bibliotecas y museos como motores de desarrollo comunitario.
“Este evento no solo rompió récords de asistencia, sino que también reafirmó nuestro compromiso de hacer de la cultura una experiencia accesible para todas las niñas, niños y adolescentes del país. Fue una jornada única en Chile, que además promueve sus derechos y fortalece el sentido de identidad colectiva” añadió la ministra Arredondo.
El Día de los Patrimonios de Niñas, Niños y Adolescentes es, sin duda, un espacio único que unió experiencias culturales en todo Chile, fortaleciendo el rol de la cultura como motor de cambio, aprendizaje y cohesión social. Con miras al futuro, este evento continuará consolidándose como un pilar en la promoción de los derechos y el desarrollo integral de las nuevas generaciones.